El viejo Shogun Sumo Isigo debe elegir a su heredero. Su hijo mayor Tekito, es orgulloso y malvado. Tedoi, su segundo descendiente, es humilde y bondadoso, pero su sueño no es reinar sino ser tatuador. El Shogun piensa que el pueblo nunca aceptará a un simple artesano y por ello elabora un plan magistral. Si el joven Tedoi es capaz de tatuar a los cuatro grandes maestros de Japón, adquirirá la condición de Gran Maestro Tatuador. Una dignidad más que suficiente para ser elegido sucesor al trono. Así comienza su aventura. El muchacho ha apostado su vida en el empeño sin saber que su pérfido hermano hará todo lo posible para frustrar su cometido. Seguro que te has dicho al leer todo este rollo: Maldita sea! Alguien debería ayudar al pobre muchacho! No te preocupes, recuerda que esta es una aventura de La Oveja Samurái.