Diana se encuentra en una situación difícil: ha roto la ley de las amazonas para salvarle la vida a una mortal, Alia, que resulta ser una descendiente de Helena de Troya, alguien capaz de ocasionar guerras que podría poner el mundo en peligro.
Ahora Diana y Alia tendrán que luchar contra un ejército de enemigos, tanto mortales como divinos, que quieren o bien destruir o bien hacerse con el poder de la guerra.