En la villa Moran el entusiasmo es palpable por el inminente evento, el más esperado por la nobleza: el baile de máscaras, que resulta muy prometedor.
Nicholas, Leticia y Cristopher ven en esa fiesta la oportunidad de, por fin, pasar una noche juntos y dejar atrás sus inquietudes y miedos.
Sin embargo, en la vida de nuestros protagonistas parece que la serenidad no tiene cabida: llamarán a la puerta los fantasmas del pasado y Nicholas se verá obligado a enfrentarse a ellos.