Natsu y Ofû visitan el templo de Sensô-ji, en Asakusa, para asistir al festival de las linternas chinas. Mientras pasean entre los puestos, se encuentran con un vendedor ambulante llamado Akitsu, quien, sin motivo aparente, regala un valioso prendedor de pelo a Natsu. En cuanto se lo prueba, la joven pierde el conocimiento y comienza a actuar de un modo que no podría resultarle más impropio. Sintiéndose en el deber de hacer que Natsu vuelva a la normalidad, Jin?ya parte de inmediato a buscar a Akitsu... ¡de quien se rumorea que es un exorcista exterminador de demonios!