Un día de hace cien años, en una imponente mansión, dos hermanos se suicidaron tomándose un misterioso veneno. ¡Pero resulta que ese veneno era nada menos que el que contiene la carne de sirena, capaz de conceder la inmortalidad solo a unos pocos! El hermano pequeño resucitó, pero parece que la pobre hermana mayor no corrió la misma suerte...¡Cuando el pasado de los hermanos sale a la luz, un horror indescriptible se cierne sobre la mansión!