Tras algunos bolos, BECK ha causado furor entre las masas y algunas discográficas han empezado a mostrar interés. Además, gracias a su voz única y a una intensa preparación, Koyuki pasa a convertirse en corista y segunda guitarra del grupo. Todo parece ir viento en popa para el joven cantante, hasta que Rikiya, el matón del instituto, decide presentarse antes de uno de los conciertos con la firme intención de molerle a palos. Por otra parte, los ensayos se intensifican para poder componer las canciones necesarias y lanzar un álbum debut, todo ello a la vez que se celebra un concurso de rock en el instituto... así que Koyuki y Saku deberán esforzarse el doble si quieren perseguir sus sueños.