No sé quién es Makkun. ¡Es enorme, da mucho miedo, me pidió que lo ayudara a esconderse y, encima, me robó 1.120.000 yenes más o menos! (Aunque después me devolvió unos tres millones.) El día en que lo conocí... me atacó, me hizo llorar y pensaba que me mataría. ¡Me entraron unas ganas terribles de morirme! Pero Makkun me preparó salmón a la plancha para desayunar, me escuchó y también ahuyentó a unos tipos a los que odiaba. Sin embargo, por alguna extraña razón, Nakamoto, su antiguo compañero y pareja de su época hacker, lo persigue sin descanso.